Los últimos once años

Mis primeras palabras y líneas con las que doy inicio a este espacio de difusión, inspirado y motivado por muchos que con mayor o menor éxito han incursionado en este medio, están dirigidas a mis padres cuyo soporte además de ejemplo han sido los pilares de mi formación, a mis hermanos, familiares, amigos y compañeros, a los que ya no están entre nosotros pero que siempre serán recordados, por supuesto que a mis futuros esperados seguidores, pero sobre todo a mi esposa e hijas.

Esta breve y sencilla introducción, resume un periodo de tiempo muy importante en mi vida, dando a conocer detalles que a lo mejor no se perciben con la lectura de un CV o perfil en algún medio electrónico.

Los últimos 11 años han sido de mucha transcendencia en mi desarrollo tanto personal como profesional, con la consecución de metas trazadas pero también con los sinsabores de los tropiezos.

Se vivían días de incertidumbre, tiempos difíciles en mi país por la crisis económica del año 1999, que conllevaron casi al colapso del sistema financiero y la recesión en el aparato productivo.  

En medio de esta vorágine se presentó una oportunidad, que sumado a una necesidad institucional por la implementación y cambios estructurales, de ingresar a la Corporación Financiera Nacional, institución del sector público abanderada en el desarrollo de los sectores productivos del país pero teniendo que dejar de lado los pequeños emprendimientos realizados.

Los últimos 11 años han sido de desarrollo profesional, con la realización de estudios de postgrado, la incursión en la docencia, la capacitación continua, paralelamente la asunción de diferentes roles como responsabilidades en la institución, que prácticamente sobrevivió a una inestabilidad política - económica que los ecuatorianos nos vimos avocados a vivir y que de seguro conocen.

Todo esfuerzo conlleva su recompensa. Producto de la dedicación, constancia y lealtad, recibí el reconocimiento por brillante trayectoria durante 10 años de servicio en la Corporación Financiera Nacional y reconocimiento al sentido de responsabilidad y cumplimiento del deber en el ejercicio de mis funciones. Reconocimiento que me llenó de orgullo pero que recibí con humildad.

También estos últimos 11 años han sido de desarrollo personal y espiritual, el disfrutar del placer de viajar mas allá de nuestras fronteras, mi enlace matrimonial con una hermosa e inteligente mujer con la cual estamos próximos a celebrar nuestro quinto aniversario, la conformación de un hogar, el nacimiento de mis dos maravillosas hijas, Luciana y Fabiana, que son nuestra bendición de Dios. 

Mi abnegación total, agradecimiento infinito y mi amor eterno para ustedes, mis tres amores, mi ilusión, con quienes emprendí una maravillosa aventura.

Antes de concluir y sin ánimo de extenderme, quisiera agradecer a todas las personas que de una u otra forma, directa o indirectamente, enriquecieron mi vida con sus palabras, reflexiones, acciones, experiencias o simplemente con su presencia. Les debo mucho y espero saber retribuirles.

Que Dios guíe mis actos, me otorgue la salud y sabiduría suficiente para continuar, como todos en la lucha constante del diario vivir. Hasta la próxima.