El Reino
Desde hace mucho tiempo había dejado el ver historias animadas sobre mundos mágicos, cuentos de hadas, reinos encantados, etc, mas bien me inclino preferentemente por programas que tratan sobre realidades como previsiones de la humanidad además de revelaciones de muestros orígenes. Hechos importantes que amplían nuestro entendimiento de los acontecimientos, y en ocasiones desvirtuando los mismos.
A raíz de la llegada de las princesas, ésto fue gradualmente cambiando. Me hicieron recordar lo que alguna vez de igual manera anhelaba, aquella aventura mágica. Con esa ilusión transmitida emprendí un viaje interior, con la visualización y oración frecuente, recorriendo esos lugares como muchos otros a los que deseo algún día poder conocer.
El tiempo transcurrió, al paso de un reloj de arena. Finalmente el dia llegó, en el cual sin necesidad de polvillo mágico, con el viento a nuestro favor, libres de pensamiento, llenos de ilusión, levantamos el vuelo por primera vez con destino a ese mundo de fantasía.
Algunos a temprana edad, otros a edad madura realizan sus sueños con alegría, experimentando diferentes emociones al conocer el reino mágico en la tierra. Siendo esa su voluntad, pudimos juntos recorrer ese mundo de historias mágicas.
Definitivamente nuestras expresiones evidenciaban, lo que nuestros sentidos percibían, mientras participabamos con los presentes en las atracciones existentes.
Definitivamente nuestras expresiones evidenciaban, lo que nuestros sentidos percibían, mientras participabamos con los presentes en las atracciones existentes.
Al final antes de que anochezca, sientiéndonos emocionados, extasiados, exhaustos nos fuimos alejando de aquella fantasía hecha realidad, quedando en el horizonte su recuerdo al iniciar nuestro viaje de retorno.
No cabe duda que la realización de los sueños es una experiencia
sublime, tanto para los que logran ver los suyos realizados, como para
los que por su intermedio lo hicieron posible. Gracias a la paciencia,
constancia y esperanza, confiamos en que estos los haremos realidad.
Nuestras emociones, recuerdos y sueños perdurarán, a lo mejor el futuro nos tenga reservado la visita a otros reinos, mientras esperamos orando la venida del suyo a nosotros.
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